Rafael Pérez de 23 años reside desde hace dos años en Málaga. El joven lepero trabaja en Supermercados El Jamón y no duda en disfrutar de su tiempo libre con amigos o practicando algún deporte. También, nos cuenta que abandonó su pueblo en busca de la independencia: “quería buscar más caminos tanto laborales como personales e incluso deportivos”.
Pérez explica que ha sacado un gran aprendizaje de vivir fuera de casa: “hay que trabajar duro día a día para que todo vaya bien y no desistir por mucho que venga. Sobre todo, aprendes que pocas veces te ayudan en tu día a día y tienes que ser tú mismo el que haga las cosas”. Asimismo, señala que al principio le costó adaptarse a su nuevo hogar: “ como todos los cambios cuesta un poco, pero luego te acostumbras rápido, conoces a mucha gente con la que te puedes mover y descubrir cosas. Además, hay muy buena hospitalidad y eso ayuda bastante. Lo que más me gusta de Málaga es la facilidad que hay para todo, movilidad, trabajo, amistades nuevas, etc. Es una ciudad de muchas oportunidades y hay que saber aprovecharlas”.
El joven onubense relata con orgullo que tuvo el apoyo de su familia y amigos cuando tomó esta decisión: “me apoyaron desde el primer momento, confiaron en mí sabiendo que iba a encontrar objetivos nuevos y no iba a tener muchos problemas para independizarme.
Para Rafa sus ratitos con los amigos jugando al fútbol son sagrados, disfruta mucho de ellos y le sirven para “desconectar”, así como para “recordar buenos tiempos”, el deporte le ayuda a sobrellevar la monotonía del día a día. “En los descansos que tengo intento entrenar atletismo, sigo compitiendo poco a poco, o me voy a jugar al fútbol con algunos amigos. Cualquier plan por Málaga me vale, tiene de todo, así como muy buenas conexiones de carreteras o transporte público para visitar pueblos, calas, montañas, playas, etc.
-Háblame un poco más de tus hobbies, ¿desde cuando haces atletismo? ¿cómo son esos ratos jugando al fútbol con tus amigos?
– Yo llevo toda mi vida haciendo deporte pero la mayoría del tiempo he estado jugando al fútbol en el San Roque. Fue con 17 años cuando me surgió la oportunidad de probar y medir mi potencial en el atletismo, gracias a mi entrenador Ramón Orta, que era preparador físico del San Roque “B”. Competí con el Atletismo Ciudad de Lepe haciendo salto de longitud, participé en campeonatos de España y conseguí un par de medallas de 2° y 3° puesto.
-¿Sueles echar de menos Lepe?
– Bastante, allí tengo 21 años de mi vida, en los que he crecido jugando a fútbol para el San Roque, siendo scout del grupo Rhode’s de Lepe y pasando por el club de atletismo Ciudad de Lepe. He conocido en todos estos sitios a muchísima gente del pueblo que siempre hemos coincidido en fiestas, eventos, cualquier paseo o almuerzo por el centro o la playa.
El joven lepero confiesa que aunque esté muy a gusto en la ciudad andaluza, la parte más difícil es echar de menos a su familia y amigos. Aún así, anima a todo el mundo a probar y salir de casa al menos durante un tiempo: “Es una vivencia que todo el mundo debería probar para cumplir objetivos, seguir rutinas, esto te ayuda a fortalecer tu propia mente y a disciplinarte más en cualquier ámbito cotidiano.
“Cada vez que tengo oportunidad suelo volver a mi pueblo, aunque solo sea para un día. Normalmente, mis días de vacaciones en el trabajo los paso todos allí con la familia y los amigos. Además, siempre que puedo les abro las puertas de mi casa a mis familiares y amigos para que vengan a visitarme cuando quieran, los llevo a las playas y calas cercanas, comemos en chiringuitos, vamos por el centro de Málaga, cenamos por allí, aquí siempre hay un sitio al que ir o algo que hacer, es la oportunidad que te brinda esta gran ciudad”.

